La red de malla, además, se caracteriza por ser autorreparadora y por tener múltiples saltos. Si una ruta de comunicaciones inalámbricas sufre interferencias o sale del sistema, la red automáticamente reenruta el mensaje a través de una ruta alternativa para formar una nueva ruta de comunicaciones inalámbricas. Cada mensaje se recibe y, después, se retransmite mientras salta de nodo en nodo hasta llegar a su destino final. Dentro de la red de malla, se permite que un solo mensaje salte 30 veces entre el nodo de origen y el de destino.